martes, 9 de agosto de 2011

Algo con valor verdadero.

Algo con valor verdadero.

 Cuando sea Grande  me gustaría ser una SONRISA pensó la mueca.
Millones de muecas se mueven por el mundo impostoras, falsas y mentirosas, queriendo imitar a su oponente la Sonrisa.

 La diferencia entre una y otra, esta en la raíz. Una es Real y la otra falsa.
 Los ojos no mienten.
 ¿Cómo estas? Bien contestó junto con su mueca, y fuego nervioso que hace parpadear agitadamente los ojos y tartamudear casi imperceptiblemente corría dentro.
 Los ojos no mienten.
 Veamos en los ojos de un niño, no parpadea como los adultos, puede pasar largo rato sin parpadear cuando observa algo o a alguien, en Su Sonrisa. Ríe cuando quiere, cuando no quiere no. Y es Real, en el sentido mas profundo. Todavía no se ha contaminado de mueca.

 No hay nada mas lindo que una Sonrisa, le hace bien al que la posee como “Bien” que nadie quitará, y le hace bien a quien esté cerca de ella y abierto a recibirla y dejarla entrar al palacio del Corazón.

  Es el Wi-Fi de las de la energía positiva por eso procuremos estar cerca.
 Cuando veamos la Sonrisa, acerquémonos (agradecidos) sin querer absorber, ni menos aun envidiando ese estado solo agradeciendo poder ser testigo participe de algo tan grande como una Sonrisa Verdadera algo milagroso.
 Una mueca jamás será una Sonrisa, deberá primero morir la mueca para dar paso a la Sonrisa Eterna.
 No hay lugar para dos.

 Quien únicamente tiene la fuerza para engendrar, y generar ese nacimiento es El Amor, EL CORAZON.
 Debemos buscar profundamente la Sonrisa eterna, la Verdadera, la que se comparte…
“Ella” no tiene Sponsor, ni publicidad, ni esta a la venta en ningún mercado como “Todo Bien Verdadero y Eterno”.

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